Show GalleryPor el término de Montealegre, transitaba la Vía Hercúlea, la calzada romana más importante de la Península, que unía directamente Cádiz con Roma, y que pasaba por las inmediaciones de Ad Palem, nombre romano con el que se conocía al lugar del Santuario y a su población.
Los restos de calzada romana son unos de los mejor conservados de la provincia de Albacete, a pesar de su abandono y a su casi total desconocimiento de su existencia. La vía pasa a unos metros del monolito que señala el Cerro de los Santos, pero es en el kilómetro 6 donde se conservan los mejores restos. Unos 200 metros labrados en roca por las ruedas de los carros con la misma anchura y de unos 30 centímetros de profundidad con un desagüe en el centro. Esta vía continúa en dirección al Llano de la Consolación, descendiendo suavemente cerca de la Rambla del Agua Salada, cruzando por los Arcos del Molino hasta llegar al Santuario de Nuestra Señora de la Consolación, en que la vía toma dirección a La Higuera.